Los monigotes nos sirven para practicar y aprender los principios básicos de dibujo, nos permitirá experimentar las distintas técnicas con mayor facilidad y jugar con distintas poses, de manera que podamos observar, comprender e identificar estos principios antes de comprometernos de lleno con el dibujo.
Una vez que manejemos estos principios básicos con soltura, podremos avanzar practicando dibujos más elaborados y complejos.
Hay muchas maneras de dibujar un monigote y no todo el mundo se siente cómodo con un tipo específico, aunque si que hay ejemplos bastante extendidos en la red por su practicidad y sencillez.
En los enlaces recomendados verás algunos ejemplos y dependerá de tí escoger aquel que te ayude a describir la pose del modelo que estés tratando de captar en muy poco tiempo.
Con el monigote el dibujo es sencillo, pero transmitimos lo necesario para comprender la profundidad y expresión de la pose. Tiene que reflejar la acción y actitud de nuestro modelo.